Picasso, la Mona Lisa y la marca personal

23 de agosto del 1911.

París se despierta con un impactante noticia:

La Gioconda ha sido robada del Museo del Louvre.

 

Las primeras investigaciones apuntan a dos sospechosos.

Sus nombres son Pablo Picasso y Guillaume Apollinaire.

El pintor y el poeta, padres del cubismo, son detenidos e interrogados por la Policía.

Resulta que, ambos bohemios, tenían antecedentes en este tipo de delitos.

Eran sospechosos de haber adquirido, de forma ilícita, un par de estatuillas íberas que habían sido robadas al Museo y que aparecieron en el estudio de Picasso.

A partir de entonces, empiezan a ser conocidos como la Banda Picasso

 

A raíz del robo, el Louvre permaneció cerrado durante una semana.

Cuando volvió a abrir, batió récord de visitas.

Al final, el robo se convirtió en una «impagable» estrategia de publicidad.

La gente iba al museo a ver el hueco que había dejado en la pared La Mona Lisa.

Y, a partir de entonces, aumentó su fama.

 

Bien,

Anécdotas aparte, Picasso fue un genio y un innovador.

Aunque no siempre fue así.

Estuvo influido por la obra de Van Gogh.

Intentó hacer una variación de lo mismo durante 20 años.

Copiando, absorbiendo, aprendiendo de los grandes.

20 años

 

Hasta que estuvo preparado para experimentar un nuevo estilo.

Lo llamó «cubismo analítico»

Si hubiera continuado por el mismo camino que Van Gogh, se habría convertido en «un Van Gogh diferente».

Sería considerado un artista impresionista más. Uno entre tantos.

Pero, abandonó el «juego del impresionismo» e inventó un nuevo juego donde era el mejor.

Eso es marca personal.

 

Carpe Diem

Emilio


 

Ahora puedes acceder a mi curso gratuito de marca personal.

10 lecciones, donde aprenderás recursos y estrategias para pasar a la acción, brillar, destacar e inspirar a los demás.

Dejarás de ser invisible

Dejarás de pasar inadvertido y podrás destacar entre tu competencia.

Deja un comentario